Chicos, como estan? Como algunos sabrán soy de Uruguay y me asombró ver que le dedicaron un espacio a Christina en un diario uruguayo. Estoy bastante desconectada del foro pero todos los días leo las noticias! Así que si les parece cambiar este tema para otro lado, no hay problema, es q no sabía donde iba.
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El día "Bionic" para el pop
Lanzamiento. El nuevo y ya controvertido disco de la cantante llega hoy a las disqueríasALEXANDER LALUZ
La cuenta regresiva del renovado sitio en Internet de Christina Aguilera llegó hoy al cero: Bionic está en la calle. Pero hay otras dos cuentas todavía inconclusas, y que mantienen en vilo la expectativa de la artista de Staten Island, Nueva York.
Una, a la espera de los veredictos críticos y las reacciones de sus seguidores (y detractores) sobre el producto definitivo, ejemplar que documenta sus nuevos intereses musicales, y el cambio de imagen que lo acompaña. Suma de variables que la han forzado a hablar y a defenderse, entre otras cosas, de las (odiosas, dicen) comparaciones con Lady Gaga y hasta Madonna.
El otro reloj, mientras tanto, corre y acumula ansiedad en torno a su debut cinematográfico con Burlesque, del director Steve Antin, donde comparte el reparto con Kristen Bell, Cam Gigandet y Cher, entre otros. Para el estreno en los Estados Unidos no queda demasiado tiempo: será el 24 de noviembre, cuando todavía persistan algunos de los ecos del lanzamiento de Bionic.
Aquí, en Uruguay, los tiempos son otros: el film llegará en enero de 2011, quizás cuando las aguas ya estén algo más calmas en el mundo pop, y todos estemos habituados a ver el "parental advisory" (advertencia a padres) en el margen inferior de la tapa de la edición de lujo ("explicit", reza en el anuncio de Amazon), y justo a la izquierda de su sugestivo rostro mitad humano, mitad máquina. Es que "no hay advertencia que por polémica no venga", diría el dicho tradicional, adaptado, claro, a los tiempos de escándalos mediáticos.
Pero justamente las crisis y controversias han sido y son los signos de los cambios. Más aún cuando se trata de una materia como la música, tan potente a la hora de manipular el tiempo como sensible en el urdido de significaciones afectivo-emotivas, físicas o racionales (o todas juntas). Después, ya producida la crisis, llegará el tiempo de aquilatar el sentido de los cambios. La blonda estrella del pop, al igual que sus ilustres colegas, maneja con soltura estos fenómenos de talla simbólica y sus efectos en la realidad inmediata. Y probado está: inteligencia y astucia para manejarlos no le falta.
Cambió radicalmente su apariencia, y, con toda la seducción explotada al límite, se zambulló, a comienzos de este año, en el agotador rodaje del videoclip del primer corte de difusión: Not myself tonight, que, además es la muestra más contundente de su giro hacia los gestos y sonidos de la electrónica. Con una mezcla de planos sonoros hecha con la pulcritud que amerita en estos casos, la canción se carga de sonidos sintéticos, una enérgica base rítmica, y derrocha en la interpretación vocal efectivos giros de connotaciones eróticas. Y vaya que funcionan. Al punto que el videoclip, que Hype Williams (alguien que sabe de clips para famosas como Jennifer Lopez, Beyoncé, Lady Gaga...), no hace más que realizarlos más explícitos aún: ella aparece rodeada de hombres mientras se va sacando (quien no lo haya visto aún, también podrá imaginarse los movimientos) sus pantalones, en otra escena son las cadenas y el cuero los que predominan. En fin, los fetiches a la orden (y generosamente).
"Hago cosas que no haría normalmente. El viejo yo se ha ido y me siento completamente nueva", proclama Aguilera. Cierto. Mucho de lo que suena en este corte, como en el resto del disco, no se conecta a simple audición con la Aguilera de Back to basics, Stripped o Christina Aguilera. Luego, en el análisis algo más detenido, las conexiones (siempre necesarias) emergen, como su preocupación por seguir atentamente el proceso de producción, la composición y las interpretaciones, así como en la dedicación al cuidado de la imagen.
Pero la clave, queda claro, está en el impacto de la diferencia, la apuesta al cambio que, según la propia artista, ya está anticipado en el título Bionic (Biónica) y en la (retro)provocativa tapa.
También ha confesado, y en no pocas oportunidades, que en este proyecto ha trabajado con compositores, productores e instrumentistas que admira. Y esa sociedad, recalcó, "ha sido una experiencia asombrosa (...) los resultados han sido mágicos". La ya citada Not myself tonight, por ejemplo, resultó del trabajo con Polow Da Don (quien también la produjo) y Ester Dean; la balada Lift me up, otro caso ya conocido, viene de la asociación con Linda Perry. Y la lista sigue: Sia Furler, Sam Dixon , Goldfrapp, Ladytron, Le Tigre, Tricky Stewart, Claude Kelly.
De todo este trabajo, el resultado, aunque todavía no dé para aquilatar el cambio, sí sigue la convicción de Aguilera: "quería dar una sensación fresca, atractiva y sexy utilizando elementos electrónicos y orgánicos para crear ambientes unas veces divertidos y juguetones y otras más introspectivos".
Cuestión de imagen, sonido y mucha producción Antes que Bionic llegara al mercado, sus canciones ya habían sacudido con "malas vibras" la red de redes, según algunos blogs y publicaciones sobre el mundo del espectáculo. Aún así, ella no se apeó del proyecto y salió a defender su plan de cambio de imagen y sonido, intentando restar peso (y seriedad) a los intentos de compararla con Lady Gaga y hasta Madonna.
Algunas críticas ya le dieron con palos y hachas, señalando lo poco acertado del giro electrónico. Otros, en cambio, apostaron a sacar a relucir viejas cuentas "faranduleras", como el bloggero Perez Hilton (antes amigo de Aguilera), quien escribió, sin escatimar el sarcasmo, al conocerse la noticia de la cancelación de la gira presentación: "esto únicamente reafirma lo que veníamos pensando desde el principio, que Bionic es una bomba".
Pero el desborde de trabajo, como lo entendieron los enojados seguidores de Aguilera, justificaba la medida de suspender el tour por Estados Unidos, y luego el de Inglaterra. Y el colmo, que ha molestado a la blonda cantante, es la comparación con su colega (y competidora) Lady Gaga. Claro, quien la haya visto el domingo en la entrega de los MTV Movie Awards, se habrán quedado con alguna "duda". Ese vestido algo estrafalario (y la censura de algunos pasajes de WooHoo), el peinado, las coreografías, abonaban las comparaciones, y todas van por ese camino. Pero ella, desde su flamante y potente sitio web arremetió con todo, para no dejar dudas de que Bionic no es copia, y la nueva imagen tampoco. Todo, dice, es parte de un cambio, y por eso para los fans el disco también se anuncia, además de la edición estándar con 18 canciones, una caja de lujo que suma seis canciones exclusivas, el álbum en formato triple vinilo, fotos también exclusivas, un poster para los 5 mil primeros compradores y el acceso a la preventa de las entradas para sus actuaciones en los Estados Unidos. Imagen, sonido y producción llevados a condición de paradigma.
El País Digital