Nos estábamos bronceando, era algo muy común en esa época que salieramos todos los hombres con nuestros trapos en la cintura para agarrar sol. Algo así como los gays hoy en día, pero con heterosexuales.
El hecho es que el sol estaba demasiado fuerte y pues, alzamos los brazos para taparnos las caras para que no nos quemara tanto! Y ahí hicieron la pintura... Estábamos todos desprevenidos!