La cantante Madonna recibió este viernes autorización para adoptar un segundo hijo en Malaui cuando la corte más alta de ese país sudafricano revirtió una decisión de un tribunal menor que consideró caduca.
Al leer el veredicto del tribunal de tres jueces, su presidente Lovemore Munlo dijo que la dedicación de la cantante a ayudar a niños pobres debería haber pesado cuando se estudió su pedido de adoptar a la niña Chifundo “Mercy” James, de tres años.
Madonna fundó la organización de beneficencia Criando a Malaui (Raising Malawi), que ayuda a alimentar, educar y dar atención médica a algunos de los niños del país con más de un millón de huérfanos, la mitad de los cuales han perdido un padre a causa del sida.
Algunos grupos de ayuda a la infancia habían expresado su preocupación de que las reglas para la protección de los niños se estaban vulnerando debido a la fama de Madonna y quizás como muestra de gratitud por lo que la cantante ha hecho por Malaui, uno de los países más pobres del mundo y que más han sido afectados por el sida.
El abogado de Madonna, Alan Chinula, dijo que llamó a su cliente tras la decisión judicial.
“Es muy temprano a la mañana en Nueva York pero está muy entusiasmada con la noticia“, dijo Chinula. “Como su abogado, estoy contento de que esto haya decidido este asunto tan controvertido”.
Chinula dijo que ahora se dedicaría a conseguirle un pasaporte a Chifundo, lo que podría llevar varios días, y que estaba esperando novedades de Madonna acerca de los planes de viaje para la niña. La adopción puede llevar un tiempo hasta volverse definitiva.
Madonna apeló luego de que una corte decidió que no podía adoptar a la niña porque no había pasado suficiente tiempo en Malaui. El tribunal también dijo que el requisito de residencia había sido ignorado cuando Madonna adoptó a su hijo David, otro niño malauí, el año pasado.
La corte de apelaciones consideró que esa decisión fue una interpretación muy limitada de leyes antiguas.
“En esta aldea global, un hombre puede tener más de un lugar de residencia”, dijo Munlo en la decisión, la que le llevó más de una hora leer. “La cuestión de la residencia debe decidirse al momento de la solicitud de adopción. En este caso, Madonna estaba en Malaui no por casualidad sino por intención. Está cuidando de varios huérfanos cuyo bienestar depende de ella. Por lo tanto, no se la puede describir como una residente temporal”.
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